Polaciones
Localidades del municipio
PolacionesBelmonte Callecedo Cotillos Laguna (la) Lombraña Pejanda Puente Pumar Salceda San Mames Santa Eulalia Tresabuela Uznayo
Territorio accidentado con alturas superiores a los 2.000 metros. La localidad de Cotillos (1.143 metros de altitud) es el segundo pueblo más alto de Cantabria. Nos encontramos en un municipio eminentemente ganadero, donde se cría especialmente ganado autóctono (tudanco) y en el que poco a poco cobra auge el turismo rural, atraído por sus inigualables paisajes y la tranquilidad de sus pueblos.
El embalse de la Cohilla nos recibe a la entrada de Polaciones, uno de los territorios más extensos y ricos de la región desde el punto de vista natural y etnográfico. Sus aldeas profundamente rurales (San Mamés, Tresabuela, Cotillos&hellip ), sus montes -por donde aún pasean algunos ejemplares de oso pardo cantábrico (en peligro de extinción)- y sus bosques, auténticos adornos de la naturaleza (hayedos de Uznayo, robledal de Cueto Cucón&hellip ), nos recuerdan que estamos en la Reserva Nacional del Saja, la más grande de España y una verdadera joya ecológica en Cantabria.
Polaciones es además un municipio donde está muy arraigado el folclore de Cantabria y el rabel (instrumento musical de cuerdas hechas con crin de caballo) tiene una gran implantación.
A la hora de comer, conviene no dejar de probar el cocido montañés y las patatas con torreznos.
Polaciones invita al senderismo por los montes de Sejos (existen numerosos refugios de montaña) y a los recorridos por el embalse de La Cohilla.
Uznayo conserva un paisaje de alto valor natural, principalmente por el hayedo que desde Liébana se prolonga por las laderas de Peña Labra. Desde Uznayo parte una senda que discurre por un atractivo paraje boscoso para llegar hasta el Collado de Sejos, en el límite de la Comunidad Campoo-Cabuérniga, lugar en el que se encuentra el yacimiento de Sejos, con menhires de la Edad del Bronce, es desde el punto de vista artístico el monumento más sobresaliente de Polaciones, sin restar por ello mérito a construcciones como las iglesias parroquiales de Tresabuela, con escudo de los Rábago, o Lombraña.