Bosques mágicos de Cantabria: paseos por la naturaleza encantada
El otoño en Cantabria se viste de dorados, ocres y verdes intensos. Es la estación perfecta para perderse entre árboles centenarios, escuchar el crujir de las hojas bajo los pies y dejarse llevar por historias que parecen sacadas de un cuento. Hoy te invitamos a descubrir bosques mágicos de Cantabria, lugares únicos donde la naturaleza se mezcla con la tradición y la mitología, ideales para recorrer en familia.
Acompáñanos en este viaje por el arboretum de Liendo, el bosque mitológico de Monte Tejas, el bosque de secuoyas de Cabezón de la Sal, el Monte Hozarco y el Habario de Pembes, cinco rincones que parecen encantados.
Arboretum de Liendo: un paseo por el mundo sin salir de Cantabria
¿Sabías que en el pequeño valle de Liendo se esconde un auténtico mapa vegetal del planeta? El arboretum de Liendo es un jardín botánico que reúne especies de árboles de distintos continentes. Es un plan perfecto para ir con niños, ya que cada árbol tiene su historia y permite hacer un viaje educativo y divertido sin moverse de Cantabria.
Durante el otoño, el arboretum se transforma en un mosaico de colores: amarillos de los arces, rojos de los liquidámbares y verdes oscuros de las coníferas. El recorrido es sencillo y accesible, ideal para familias con carrito o para quienes buscan un paseo tranquilo. Además, los paneles informativos ayudan a reconocer las especies y despertar la curiosidad de los más pequeños.
Plan en familia: llevar una libreta y proponer un “reto botánico”: ¿quién descubre más formas de hojas diferentes? Una manera divertida de aprender mientras se disfruta del aire puro.
Bosque mitológico de Monte Tejas: historias y leyendas entre los árboles
En San Felices de Buelna nos espera un bosque muy especial: el bosque mitológico de Monte Tejas. Aquí la naturaleza convive con las criaturas de las leyendas cántabras. Entre robles y castaños se alzan esculturas de seres mágicos como el ojáncano, el trenti o la anjana.
El sendero es fácil y corto, perfecto para recorrer con niños. Cada parada se convierte en una oportunidad para contar un cuento, imaginar aventuras y dejar volar la imaginación. Los más pequeños disfrutan buscando las figuras escondidas entre la vegetación, mientras los adultos conectan con las raíces culturales de Cantabria.
Plan en familia: llevar una linterna pequeña y jugar a “exploradores de mitos”. Cada figura puede convertirse en el inicio de una nueva historia inventada entre todos.
Bosque de Secuoyas de Cabezón de la Sal: gigantes que tocan el cielo
Pocos esperan encontrar un bosque californiano en pleno corazón de Cantabria, pero en Cabezón de la Sal aguarda una sorpresa: un extenso bosque de secuoyas plantado a mediados del siglo XX que hoy se ha convertido en uno de los paseos más mágicos de la región.
Estos árboles colosales superan los 30 metros de altura y crean un ambiente único. Caminar bajo sus copas altísimas transmite una sensación de pequeñez y asombro que fascina tanto a adultos como a niños. El recorrido es corto y accesible, con pasarelas de madera que facilitan la visita incluso con carritos de bebé.
En otoño, la luz que se filtra entre las ramas y el suelo cubierto de hojas secas hacen del paseo una experiencia inolvidable. Recuerda que las raíces de los árboles son muy sensibles y que no debemos abrazarlos ni tocarlos, por lo que la visita es recomendable hacerla por las pasarelas.
Plan en familia: jugar al “árbol más alto”. ¿Quién encuentra la secuoya más impresionante? Una excusa perfecta para mirar hacia arriba y dejarse sorprender.
Monte Hozarco: la magia de la Hermida
En pleno desfiladero de la Hermida se encuentra el Monte Hozarco, un bosque donde los robles y las hayas se mezclan con leyendas de anjanas, brujas y seres mágicos. Este paraje esconde miradores impresionantes, como el del propio Hozarco, que regala vistas únicas sobre el río Deva y los Picos de Europa.
El paseo hasta allí es accesible y muy recomendable en otoño, cuando las hojas caídas pintan el suelo de tonos cálidos. Para los más pequeños, el bosque se convierte en un escenario de cuentos: basta con imaginar que tras cada tronco puede aparecer un personaje fantástico.
Plan en familia: llevar prismáticos y organizar un “safari de colores”. Observar las diferentes tonalidades de hojas, identificar aves o simplemente descubrir la inmensidad del paisaje.
Habario de Pembes: el bosque de los robles mágicos
En la localidad de Pembes (Camaleño) encontramos uno de los robledales más impresionantes de Cantabria: el Habario de Pembes. Es un bosque de robles centenarios, con troncos retorcidos que parecen figuras esculpidas por el tiempo.
El sendero es de baja dificultad y perfecto para familias. Pasear por el Habario es como entrar en un escenario de película fantástica. En otoño, la alfombra de hojas secas invita a saltar, correr y disfrutar como niños. Además, el pueblo de Pembes, con sus casas de piedra y ambiente tranquilo, completa la excursión con un toque auténtico y rural.
Plan en familia: organizar un juego de “formas en los troncos”. ¿Ese roble parece un dragón? ¿O quizás un gigante dormido? La imaginación se convierte en la mejor guía de viaje.
Consejos para disfrutar de los bosques mágicos en otoño
- Ropa cómoda y de abrigo: el tiempo en Cantabria puede cambiar rápidamente, sobre todo en montaña.
- Calzado adecuado: mejor botas o zapatillas de senderismo que resbalen poco.
- Respeto por la naturaleza: no dejar basura, no arrancar plantas, no abrazar los árboles ni pisar sus raíces y no molestar a los animales.
- Picnic responsable: llevar bolsas para recoger todo lo que se genere.
- Disfrutar sin prisas: lo mejor de estos lugares es dejarse llevar y sentir la magia.
Cantabria, un destino de cuento
Recorrer estos bosques mágicos de Cantabria es una manera única de vivir el otoño en familia. Cada uno ofrece algo especial: un viaje botánico por el mundo, un encuentro con personajes mitológicos, árboles gigantes que rozan el cielo, miradores de ensueño o robledales encantados.
Si buscas un plan diferente, lejos del ruido y en contacto con la naturaleza, Cantabria te espera con su mejor cara otoñal. Solo hace falta calzarse las botas, abrir bien los ojos y dejarse envolver por la magia de sus bosques.
¿Conocías ya alguno de estos bosques?. Cuéntanos tu experiencia en nuestras redes sociales (Facebook, X e Instagram) con el hashtag #CantabriaApetece.
Porque Cantabria es infinita… también en naturaleza.

















