Noja
Localidades del municipio
NojaNoja
Localizado entre la ría de Quejo y la punta del Brusco, su costa se extiende en una sucesión de playas que constituyen la verdadera atracción turística de este municipio: playa de Tregandín (4,4 km.) y playa de Ris (2,5 km.) Además existen en la zona humedales de gran valor ecológico, lo que justifica su inclusión en la Reserva Natural de las Marismas de Santoña y Noja.
El municipio se ha convertido en los últimos años en un centro turístico de gran relevancia, con gran concentración de visitantes en los meses de verano.
Pero además de una extraordinaria costa, Noja goza de otros atributos muy apreciados, con exponentes de arquitectura civil como la casa-palacio de los Venero, la casona de los Garnica, la de los Velasco . La iglesia parroquial de Noja (siglo XVII) es el mejor ejemplo de construcción religiosa. Y junto a todas ellas, merece especial atención el molino de Victoria construido en 1629.
Desde el punto de vista histórico, Noja se complace de haber sido tierra natal de un personaje como Luis Vicente de Velasco e Isla, capitán de navío de la Real Armada que defendió el castillo del Morro a la entrada del puerto de La Habana, contra el ejército de Inglaterra.
Las fiestas populares son numerosas en el municipio en los meses estivales: San Juan (24 de junio), San Pedro (29 de junio), Nuestra Señora del Carmen (16 de julio), , San Emeterio y San Celedonio (30 y 31 de agosto).
Playa de Trengandín
La playa de Trengandín tiene seis kilómetros de dorada arena y una privilegiada orientación al noreste que la convierte en una de las más tranquilas de Cantabria. Sus cristalinas aguas y variado paisaje submarino la hacen especialmente recomendable para la práctica del buceo. Multitud de rocas, piscinas naturales y pequeñas pozas aparecen en la bajamar, descubriendo largos tramos de aguas poco profundas que invitan a nadar sin peligro ni dificultad.
Playa de Ris
La playa de Ris, con cuatro kilómetros de finísima arena, es sin duda la más concurrida de Noja, tanto por la calidad de sus servicios y accesos, como por sus cuidadas infraestructuras veraniegas. Frente a Ris se encuentra la isla de San Pedruco, una paraíso natural protegido por abundante vegetación y habitado por miles de gaviotas, al que es posible acceder en la bajamar. Su orientación hacia el norte permite la formación de abundante oleaje para practicar el surf, con largas “barras” de olas de empinada pendiente, especialmente en días de viento sur.
La playa de Ris y “El Brusco” son los lugares más indicados para el piragüismo y el surf.