Isla, un hito en el Camino del Norte

Llegar a Isla por el Camino del Norte nos depara alguna buena sorpresa y como no tenemos que elegir entre gastronomía, monumentalidad o rincones con encanto nos disponemos a disfrutar de todo.  

Caminamos por la carretera desde que salimos de la Marisma de Santoña, Victoria y Joyel hasta que avistamos el Palacio de los Condes de Isla, un imponente conjunto arquitectónico que cuenta con todos los elementos representativos de la casona Montañesa: Portalada, Vivienda, capilla y escudos de armas de la familia en cada uno de ellos. 

Subimos hasta la Iglesia que preside el conjunto urbano y vemos un rincón de estos que es difícil de encontrar si no es caminando. Libros de segunda mano que hablan de casi todo y en varios idiomas:  “El almacén de los Libros Olvidados”, por si de repente te quieres perder entre los pensamientos de los que te precedieron. 

Una vez que llegamos al conjunto monumental de la iglesia y el antiguo Hospital de peregrinos, volvemos nuestra mirada hacia los pasos que dimos y los que daremos para disfrutar de dos panorámicas bien diferentes: En entorno del Parque Natural de la Marisma de Santoña, Victoria y Joyel a nuestra izquierda y el camino hacia Bareyo, presidido por la Torre Medieval de Cabrahigo. 

Después de este despliegue de arte arquitectónico y de la caminata, continuamos hacia Bareyo, no sin antes deleitar el paladar los el excelente producto de la huerta de Arnuero.