Cinco platos de cuchara para este otoño
La gastronomía cántabra es rica en materias primas, el mar cantábrico, sus ríos, sus pastos verdes y sus pequeñas huertas familiares ofrecen una amplia gama de productos, que cocinados al modo tradicional de los cántabros, obtienen como resultado una de las gastronomías más ricas y de mayor personalidad del país.
Las temperatura ya no son tan altas, los abrigos y la ropa de otoño ha llegado a nuestros armarios y los paseos por la playa, nos resistimos a abandonarlos eso sí, excepto algún valiente, que aún quedan, el resto los hacemos vestidos, y no en traje de baño.
El otoño ya es el protagonista de nuestras vidas y al igual que hemos realizado cambios en nuestro vestuarios, nuestras papilas gustativas comienzan a eliminar la necesidad de tomar comidas frescas y llenar la nevera con productos para aliviar el calor, y deciden adentrarnos en el mundo de los platos de cuchara. Alubias, garbanzos, guisos de carne….serán algunos de nuestros protagonistas gastronómicos en los siguientes meses del calendario.
En esta época del año los platos de cuchara son los protagonistas en las cocinas. Por eso vamos a recomendarte hoy 5 platos de cuchara típicos de Cantabria, donde gracias a que en sus tierras se cosecha una amplia y selecta relación de materias primas gastronómicas, la riqueza de este tipo de platos es amplia y exquisita.
¿Preparado para salivar?
Cocido Montañés
Al hablar de platos de cuchara en nuestra tierra, no queda más remedio que comenzar con uno de los más conocidos y típicos, que lleva implícito en el nombre la marca de la tierra.
Los orígenes del cocido montañés se sitúan en el siglo XVII cuando se preparaba para combatir los rigores del clima invernal húmedo y frío de la zona.
Actualmente, este plato se puede comer con frío o con calor y es uno de los más conocidos de la gastronomía cántabra. Una de las zonas por excelencia en la preparación del cocido montañés es el valle de Cabuérniga, donde se celebra cada primer domingo de septiembre, en el pueblo de Ucieda, la fiesta del cocido montañés, con más de 35 años de historia.
Cocido Lebaniego
La riqueza en productos y elaboraciones en nuestra región es tal, que tenemos dos platos de cocido que son señas de identidad de dos comarcas distintas, pero representan igualmente la gastronomía cántabra.
El cocido lebaniego es la versión de la Comarca de Liébana que a diferencia del montañés se elabora con los pequeños garbanzos típicos de “Potes”, en vez de con alubias. Es un plato muy completo, ya que contiene todos los ingredientes necesarios para una dieta adecuada, sobre todo, si se tiene en cuenta que era comida de gente que hacía mucho más ejercicio físico que se hace ahora. Se comía principalmente en invierno porque era bueno para añadir calor corporal.
Alubias con Almejas de Pedreña
Cantabria es una región muy rica en materias primas y al estar bañada por el mar no podemos dejar de incluir un plato de cuchara que tenga como protagonista un producto del mar: las alubias con almejas de Pedreña.
La almeja de Pedreña es muy apreciada por ser fina, tener una excelente calidad y aguantar más tiempo viva fuera del agua que cualquier otra. Es otra de las señas de identidad gastronómicas de Cantabria. Si un producto de esas características lo incluimos en un guiso de alubias, el resultado solo puede ser bueno.
Olla ferroviaria
La olla ferroviara da nombre a un puchero donde se preparan cocidos, patatas con carne y guisos en general. La olla surgió en torno a la línea ferroviaria de la Robla, que unía León con Bilbao, a finales del siglo XIX, cuando los trabajadores del tren idearon estas ollas para cocinar en el propio ferrocarril aprovechando el carbón que se utilizaba en las máquinas.
Para ello, colocaban las brasas del carbón en la carcasa de metal de la olla, e introducían el puchero donde iban añadiendo los ingredientes del guiso, frecuentemente, patatas con carne. Hoy en día las ollas son en muchos hogares la excusa perfecta para reuniones familiares o de amigos donde se hace un buen guiso de alubias, garbanzos o patatas, y se pasa el día, frío en el exterior, en buena compañía alrededor del olor de las brasas.
Aunque en toda Cantabria se ha extendido la utilización de estas ollas, la zona de Campoo sigue siendo donde más arraigadas están y donde más abundan los artesanos, y es que la línea de La Robla transitaba por estas tierras del sur de Cantabria.
Caricos
No podemos olvidar en esta lista de platos de cuchara cántabros los famosos caricos, unas sabrosas alubias rojas de la región muy apreciadas, tanto dentro como fuera de Cantabria y tradicionalmente cultivadas en explotaciones familiares.
Su producción es escasa, en general para consumo propio, siendo por ello su precio relativamente elevado. Son unas alubias extremadamente tiernas y con apenas pellejo. Los caricos con chorizo son sin duda, uno de los grandes platos de la gastronomía cántabra.
A partir del mes de septiembre, las vainas de los caricos se están secando y en breve se despojarán de su cubierta, a partir de aquí, dependiendo de cómo haya venido el clima, ya se pueden ir degustando esta alubia.
Lo cierto es que ya en noviembre, su consumo se generaliza, como el resto de tipos de alubias y en noviembre se celebra en la localidad cántabra de Casar de Periedo la Feria de la Alubia y la Hortaliza.
Desgusta Cantabria y prueba estos cinco platos típicos de la región este otoño.
¡Te esperamos!
