Altamira, un premio para cinco afortunados a la semana

Desde hace ya un año, cinco visitantes del Museo Altamira, tienen la fortuna cada viernes, de visitar la Cueva original. ¿Quieres saber cómo conseguirlo? En este post lo descubrirás.

Altamira es una de las señas de identidad de Cantabria. Un punto en el mapa conocido en todo el mundo. No en vano, hablamos de uno de los tesoros más importantes del planeta, en lo que a arte Paleolítico se refiere. Aunque las pinturas se distribuyen por casi toda la cueva, lo más destacable es, sin lugar a dudas, la Sala de los Polícromos, conocida como la Capilla Sixtina del arte cuaternario, donde se encuentra la famosa veintena de bisontes.

Esta sala es la imagen que a todos nos viene a la cabeza cuando nos mencionan Altamira, con permiso de Antonio Banderas, y su papel en la magnífica película, estrenada en Santander en abril de este año, que recrea el descubrimiento de la cueva por Marcelino Sanz de Santuola en 1875.

La experiencia de visitar la cueva y ver sus pinturas es un privilegio de unos pocos, por razones de conservación de la misma. No obstante la Neocueva, réplica de la original, situada en el Museo de Altamira, permite al visitante vivir la experiencia, en un entorno accesible y que te situará en el momento que los hombres del Paleolítico poblaron y pintaron la cueva.

Pero, si la experiencia del Museo te deja con ganas de conocer la cueva original, prueba suerte. Cada viernes del año, entre todos los mayores de 16 años que compran la entrada para visitar la Neocueva antes de las 10:30 horas, se sortean cinco entradas a la cueva original.

La pasada semana decidí vivir la experiencia, que es sencilla y emocionante. Una vez rellenas el papel con tus datos y los introduces en la urna transparente, siguiendo las instrucciones del amable personal del Museo, comienzan los nervios y la emoción, que se reflejan en el revuelo que se forma en el hall. La suerte está echada, y no era la mía, ya que los cinco agraciados fueron un visitante japonés, un cántabro, una andaluza, una valenciana y una alemana.

Mientras veía alejarse a los cinco afortunados, quienes comienzan con una su visita guiada de 15 minutos en la Neocueva, continúan con 37 minutos en la cueva original y se deleitarán durante 8 minutos en la famosa sala de los bisontes, descubrí, gracias a Pilar – subdirectora del Museo- algunas de las anécdotas de este sorteo.

Para aquellos que penséis que es difícil que os toque, os diré que una familia de chilenos que estaban de turismo en la región, tuvieron la suerte de entrar el padre y los dos hijos. Además, hay dos personas que han sido agraciadas con la suerte dos veces cada uno. Como veis no es misión imposible. Aunque, para hacer honor a la verdad, os diré que una persona participó 15 veces en el sorteo hasta que le tocó, y que un turista francés vino expresamente desde París en dos ocasiones, y a la segunda la fortuna estuvo con él. La oportunidad de entrar en la cueva está al alcance de todos, de hecho el pasado mes de abril entró una señora de 84 años, lo que demuestra que visitar Altamira «no tiene edad».

Pero ¿qué hacer si no te toca?. En nuestro próximo post lo descubrirás. Nos vemos en Cantabria.