El Corte Inglés entregará al Parque de la Naturaleza de Cabárceno las mermas de frutas y verduras para alimento de los animales
López Marcano y Castellote Flórez, director del Grupo en Castilla y León-Cantabria, destacan el compromiso con la sostenibilidad y el objetivo de avanzar en la estrategia medioambiental de Residuo Cero
CANTUR y El Corte Inglés han cerrado un acuerdo de colaboración cuyo objetivo es el aprovechamiento de las mermas de frutas y verduras, que habitualmente se descartan de los lineales de los supermercados, para la alimentación de los animales del Parque de la Naturaleza de Cabárceno.
El acuerdo ha sido firmado hoy por el consejero de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, Javier López Marcano, en su calidad de presidente del Consejo de Administración de CANTUR, y el director regional de El Corte Inglés en Castilla y León-Cantabria, Ignacio Castellote Flórez, y representa el compromiso por ambas partes con los objetivos de desarrollo sostenible y la producción y el consumo responsables.
Los productos que se donarán al Parque de la Naturaleza de Cabárceno no cumplen con los parámetros estéticos para la venta al público en El Corte Inglés de Santander y su hipermercado, pero siguen conservando sus condiciones de calidad para su consumo y pueden emplearse en la alimentación animal mediante su transformación y enriquecimiento.
López Marcano ha destacado el valor de esta acción y de la donación por parte de El Corte Inglés de Santander que va a permitir avanzar en el objetivo de cero residuos, evitando la generación los mismos con destino al vertedero y reduciendo, además, emisiones contaminantes.
Estamos cumpliendo una responsabilidad que nos atañe como administración y como empresa en beneficio de la sociedad y en el desarrollo de un nuevo modelo de actividad económica y, especialmente, con el afán de contribuir a dejar las nuevas generaciones un mundo mejor y más sostenible, ha afirmado.
El director de El Corte Inglés en Castilla y León-Cantabria ha explicado que este acuerdo representa un paso más en la implantación de la estrategia de gestión ambiental que está desarrollando el Grupo, denominada Residuo Cero y certificada por AENOR.
Dicho certificado supone un compromiso por parte de El Corte Inglés para gestionar el 100% de los residuos generados y valorizar, través de productos de economía circular, al menos el 90% de los mismos, lo que permite aprovechar subproductos que, de otra forma, constituirían directamente residuo.
Castellote Flórez ha recordado que este acuerdo con CANTUR se suma a otras iniciativas desarrolladas en Cantabria por el Grupo. Entre ellas, las donaciones directas que ya hace de productos aptos para el consumo humano a la Parroquia de Nueva Montaña y a la Residencia de Mayores Santa Lucía.
El directivo de El Corte Inglés ha subrayado, en este sentido, la implicación que siempre ha buscado esta empresa con la sociedad cántabra, así como el espíritu de cercanía al bienestar de las sociedades locales en las que estamos presentes, ha señalado, al explicar que este acuerdo también se ha firmado con Bioparc Valencia y Fuengirola y el Zoológico Río Safari de Elche.
Economía cíclica del producto
Los productos que se van a utilizar como alimentos de Cabárceno cumplirán la normativa específica de alimentación animal, incluyendo la higiene del proceso y la trazabilidad de la alimentación en animales.
El acuerdo de colaboración incluye, además, el compromiso por parte del parque de la naturaleza de producir compost con las heces de los animales y con el excedente de materia orgánica no consumida que será destinada a la reforestación.
De esta forma, se reduce al mínimo la generación de residuos y se multiplican los beneficios ambientales, económicos y sociales.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), actualmente se desperdicia un tercio de todos los alimentos producidos a nivel mundial.
En respuesta a esta realidad, la ONU ha incluido entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la meta de una producción y consumo responsables. La intención es reducir a la mitad el desperdicio de alimentos per cápita mundial en la venta al por menor y a nivel de consumidores y reducir las pérdidas de alimentos en cadenas de producción y suministro, incluidas las pérdidas posteriores la cosecha, en el horizonte de 2030.